lunes, 8 de agosto de 2011

Crisis religiosa: ¿Se muere la Iglesia o cae Babilonia?


NUEVA YORKEstados Unidos (El Mundo, La Razón/ ACPress.net) Se acaba de publicar el informe ARIS, con entrevistas a 54.000 norteamericanos, y el resultado es claro: las iglesias de teología liberal se mueren. Por ejemplo, la iglesia de Obama, a favor del aborto y el matrimonio homosexual, baja en un 46 por ciento su membresía. En conjunto, las iglesias de teología liberal de EEUU pierden un tercio de sus parroquianos, mientras que la católica también disminuye y las conservadoras evangélicas crecen.

Uno de las características de la sociedad norteamericana que más choca a los europeos es la presencia de la religión en la vida pública, especialmente en la política. Sin embargo, de acuerdo con un estudio publicado este lunes, EEUU se están convirtiendo en un país menos religioso, o al menos, donde sus iglesias tradicionales van a tener menor influencia.

El macroestudio, realizado por el Trinity College de la Universidad de Hartford, es considerado como el más completo sobre hábitos y creencias religiosas, pues en el censo oficial no existen preguntas sobre religión. En la encuesta participaron 54.000 personas, y los cambios que en ella se registran son mayores de lo esperado.

CIFRAS GLOBALES
Al presente, los cristianos constituyen el 76% de todos los adultos estadounidenses, en comparación con el 77% en el 2001 y alrededor del 86% en 1990.

En cuanto a las minorías judía y musulmana, destaca que los judíos han bajado del 1,8% de la población, al 1,2%, mientras que los musulmanes se han doblado -eran el 0,3%, y ahora son el 0,6%. No obstante, los expertos consideran que ambos grupos están infrarrepresentados. En cuanto al número de los mormones permaneció estable en 1,4% de la población. 

En cambio, el número de personas que no se consideran parte de ninguna iglesia, se ha doblado, y ya suman el 15% de la población. Así pues, son el tercer grupo más numeroso después de los bautistas y los cristianos.

"Más que nunca antes, la gente simplemente está construyendo su propia historia sobre quién es... Dicen yo creo en mí mismo", declara Barry Koshim, uno de los autores del estudio. Así pues, concluye que la amenaza a las iglesias cristianas no lo constituyen otras religiones, sino el rechazo de cualquier religión institucionalizada, y su substitución por un espiritualismo individualista.

Otra de las conclusiones del estudio es que todas las regiones del país se han vuelto más diversas desde el punto de vista religioso, probablemente debido a los procesos de migración interna. "La religión en los EEUU es plural, y probablemente aún lo será más. Es curioso porque tendemos a pensar en la religión como algo estable... pero hay muchos más cambios de los previstos", afirma John Green, profesor especializado en el estudio de las religiones de la Universidad de Akron (Ohio).

DESCENSO DE LOS CRISTIANOS EN GENERAL
En comparación con los resultados de este mismo estudio realizado en 1990, el porcentaje de ciudadanos que se declara cristiano, sea cual sea su denominación, se ha reducido un 11%, situándose en el 76%. A pesar de que el país tiene hoy 50 millones de habitantes más, prácticamente todas las iglesias cristianas han perdido fieles.


Los investigadores dijeron que la disminución en las filas de los grupos evangélicos tradicionales -en general también más liberales, con excepciones-, como metodistas, luteranos y episcopales, explica en gran medida el cambio. Durante los últimos siete años, los evangélicos o protestantes tradicionales pasaron de ser el 17% al 12,9% del total de la población.

En concreto el estudio muestra que la Iglesia Episcopaliana ha perdido casi la tercera parte de sus feligreses (un 30 por ciento) en 7 años (del 2001 al 2008) y que la United Church of Christ (UCC), en la que se bautizó Barack Obama, ha perdido aún más, un 46,6% de sus miembros, en este mismo periodo.

En cambio, los cristianos evangélicos "nacidos de nuevo" ("born again"), de teología y moral conservadora tienden al alza y representan cerca del 20% de la ciudadanía. Es más, los cristianos evangélicos "nacidos de nuevo" representan el 34% de todos los adultos estadounidenses y el 45% de todos los cristianos, de acuerdo a la encuesta.

En cambio el porcentaje de pentecostales se mantuvo estable desde 1990 en un 3,5%, un resultado sorprendente considerando la acentuada expansión de ese movimiento en el mundo.

UCC: LA IGLESIA DE OBAMA
Según el informe «Clergy Voices 2008», en la United Church of Christ (UCC) el 79 por ciento de sus pastores cree que el aborto debe ser legal siempre o casi siempre (como de hecho sucede en EEUU), y el 83 por ciento de ellos está a favor de entregar niños en adopción a parejas homosexuales. Cuando Obama afirma que es «cristiano» se refiere a esta iglesia que en el 2001 contaba con 1,3 millones de feligreses y que en el 2008 ya sólo con 736.000. 

Fruto de ello es que la UCC, nacida en 1957, cuenta en Dallas con una «catedral» dirigida especialmente a personas que aceptan las relaciones homosexuales, con unos 3.500 fieles. No todas las iglesias de la UCC son iguales, ya que esta denominación permite que cada parroquia tenga su propia doctrina sobre cualquier tema, pero en el 2005 su Asamblea General recomendó que todos sus grupos locales admitiesen el matrimonio del mismo sexo porque “bíblica y teológicamente no hay justificación» para no celebrarlo en la iglesia ni en la vida civil”.

Los unitaristas de Puerto Rico no aceptaron esta propuesta ni siquiera como recomendación, y se separaron de la UCC en el 2006.

LOS EPISCOPALIANOS O ANGLICANOS DE EEUU
En el 2000 los episcopalianos (anglicanos de EE UU) aceptaron las relaciones sexuales fuera del matrimonio, incluyendo las prácticas homosexuales. En el 2003 se ordenó obispo a Gene Robinson, un hombre que se divorció de la mujer con la que tuvo dos hijos para marcharse a vivir con su pareja homosexual. En el 2006 la iglesia episcopaliana se declaraba militante a favor del matrimonio gay. En el 2008 casi todos sus obispos californianos (excepto el de San Joaquín, que acabaría marchándose) se opusieron a la gran alianza religiosa que se produjo en California en defensa del matrimonio heterosexual. 
Como resultado de todo ello los episcopalianos vieron el año pasado cómo cuatro grandes diócesis enteras (San Joaquín, Pittsburgh, Quincy y Fort Worth) se marchaban, hartas de la teología liberal, para fundar su propia Iglesia Anglicana de Norteamérica.

LA TEOLOGÍA LIBERAL

La aprobación de matrimonios homosexuales o la defensa del aborto libre no es tanto un problema exclusivamente moral, sino que va unido a una teología liberal de fondo, que admite que Jesús no era realmente Dios, que no nació de una mujer virgen, o que no llegó a realizar auténticos milagros o a resucitar físicamente de forma real; es decir, elimina todo lo sobrenatural de la fe y la Biblia, relegándolo a la condición de mitos, tradiciones o supersticiones.

Todo ello surge, en el fondo, del principio de ver la Biblia como un libro que “contiene” la Palabra de Dios, pero que no es la Palabra inspirada de Dios, eligiendo lo que se considera como importante o secundario de una forma subjetiva.

Esta teología, que lleva a un relativismo cada vez mayor, va unido también a un encuentro religioso ecuménico abierto, ya que el relativismo permite amoldarse a cualquier corriente de pensamiento y teología siempre que permita o consienta la teología liberal.

ESCÁNDALOS SEXUALES AFECTAN A LA IGLESIA CATÓLICA

La iglesia Católica de EEUU también decrece, pero en su caso mantiene un 25% de la población en sus filas frente al 26% en 1990; aunque esto se debe a que la mayoría de sus fieles se corresponden con las decenas de millones de inmigrantes llegados desde Latinoamérica, donde hay un alto porcentaje de católicos.

Según los autores del estudio, esta cifra refleja en realidad un claro descenso de los católicos de EEUU y se explica por los escándalos por abusos sexuales cometidos por sacerdotes que han salido a la luz durante los últimos años

Para que se hagan una idea, la Iglesia Católica estadounidense pagó 436 millones de dólares en el 2008 por casos de abusos sexuales en los que estaban involucrados miembros del clero, indica un informe oficial eclesiástico divulgado esta semana. Esta enorme suma fue pagada en acuerdo con las víctimas, según el informe, que señala que la Iglesia Católica está aplicando una guía de normas para proteger a los niños.

El informe señala que el año pasado se presentaron 803 nuevas denuncias de abusos, más de la mitad de las cuales corresponden a niños, contra 692 en el 2007. Más de la mitad de las nuevas denuncias corresponden a casos de abusos sexuales, que los denunciantes sitúan entre 1960 y 1974. Muchos de los supuestos abusadores murieron o ya no ejercen sus ministerios religiosos.

Dos tercios de las víctimas eran varones y más de la mitad tenían menos de 18 años cuando se produjeron los abusos. Más de una de cada cinco víctimas tenía menos de 10 años cuando fueron abusadas.

La Red de Sobrevivientes de Abusos de Sacerdotes (SNAP por sus siglas en inglés) acusa al informe de enfocarse en las víctimas de los abusos pero no destaca a "los obispos que ocultaron información crucial sobre los pedófilos en la Iglesia (Católica) que bien pudo haber impedido futuros traumas en la infancia. Prácticamente ningún obispo se hizo responsable de haber ocultado a los agresores", dice Barbara Dorris, funcionaria de la SNAP.

Los ateos salen del armario eclesiástico

Pastor holandés asegura que Dios es solamente una buena idea 

Holanda.- El reverendo Klaas Hendrikse puede ofrecer a su congregación poca esperanza de que haya vida después de la muerte, y no es el tipo de persona que busca congraciar a la gente.

Con una presencia imponente en sus ropas negras y alzacuello blanco, Hendrikse preside el servicio dominical en la Iglesia del Éxodo en Gorinchem, centro de Holanda.

Es parte de la Iglesia Protestante holandesa dominante, y el servicio es bastante convencional, con himnos, lecturas de la Biblia y oraciones. Pero el mensaje en el sermón de Hendrikse se siente oscuro: "Aprovechen lo más que puedan la vida en la Tierra, porque probablemente será la única que tengan".
"Personalmente, no tengo talento para creer en la vida después de la muerte", dice Hendrikse. "No, para mi nuestra vida, nuestra tarea, está antes de la muerte".

Y Klass Hendrikse tampoco cree que Dios exista como una cosa sobrenatural.

"Cuando ocurre, esto ocurre entre nosotros, entre tú y yo, entre la gente, es donde puede ocurrir. Dios no es para nada un ser… es una palabra para describir la experiencia, la experiencia humana."

Hendrikse describe el recuento bíblico de la vida de Jesús como una historia mitológica sobre un hombre que muy bien pudo no existir, aun cuando sea una fuente valiosa de sabiduría sobre como llevar una buena vida.

Su libro "Creer en un Dios No Existente" provocó llamados de cristianos más tradicionalistas para que fuera removido. Sin embargo, en una reunión especial de la iglesia se decidió que sus puntos de vista estaban tan extendidos entre otros pensadores eclesiales que no se le podía señalar de forma individual.

Un estudio de la Universidad Libre de Amsterdam encontró que uno de cada seis clérigos en la Iglesia Protestante holandesa era o agnóstico o ateo. BBC.

Una muy buena pregunta para hacerte: ¿Cree tu pastor lo que enseña? ¿Le cree a Dios?

martes, 2 de agosto de 2011

Pastor de Lobos

Pat Robertson es un consumado activista político de la ultraderecha
Nació como Marion Gordon Robertson, pero el primero de esos nombres lo consideró "afeminado" y el segundo "afectado", así que prefirió la forma en que lo llamaba su hermano menor. Por eso millones le conocen como Pat Robertson, uno de los telepredicadores más famosos e influyentes de Estados Unidos, un consumado activista político de la ultraderecha, millonario (su fortuna se calcula entre los 200 y los mil millones de dólares) y fundador de numerosas organizaciones y corporaciones, entre estas el Centro Estadounidense para la Ley y la Justicia, la Coalición Cristiana, la Universidad Regent y la cadena de radio y televisión Christian Broadcasting Network (CBN).

Desde su show de televisión The 700 Club o Club de los 700, lanzado al aire por muchos canales dentro de EE.UU. y por los afiliados a CBN en todo el mundo, sus puntos de vista, fuertemente conservadores y controversiales, se riegan a diestra y siniestra —o mejor desde una siniestra derecha— en declaraciones que crean problemas por doquier.

Vinculado muy estrechamente al Partido Republicano, al punto que fue candidato en las elecciones presidenciales de 1988, Pat Robertson hizo nuevamente de las suyas este miércoles cuando dijo que había que asesinar al presidente venezolano Hugo Chávez y ahorrarse así 200 000 millones de dólares en una nueva guerra.

Al día siguiente, tras la turbulencia desencadenada, el reverendo intentó resolver el entuerto que, como en otras oportunidades, obligó a las autoridades gubernamentales de Estados Unidos a esbozar un "distanciamiento" apenas visible porque un vocero bushiano asumió la responsabilidad de aclarar: Robertson es un "ciudadano privado".

Pero todo el mundo sabe que las falsedades, acusaciones y campañas oficiales del gobierno de George W. Bush contra la Revolución Bolivariana en Venezuela dan pábulo a que el extremismo fundamentalista estadounidense proceda de forma tan desaforada, aunque Robertson no necesite de tal estímulo; a fin de cuentas él es uno de los pastores de esos lobos y expresa aquello en lo que todos creen: un mundo fuerte bajo la égida estadounidense... Todos los demás militan en la herejía política y religiosa, según su concepción de ese universo cristiano y blanco.
Solo que a Robertson se le va la lengua de vez en cuando y esta fue una de esas.

Aboga sin sonrojarse por una reforma de la Constitución estadounidense que rompa las barreras Iglesia-Estado y ese Estado sería dirigido por cristianos y, en su defecto, por judíos; nadie más es digno ante sus fuertes criterios ultraconservadores, pues todos los demás están y viven en pecado.

La guerra le atrae desde su niñez. Cuando tenía 12 años se enroló en una preparatoria militar en Maryland y luego siguió estudios de enseñanza media en otra escuela similar en Tennessee. Para no perder sus estudios universitarios optó por alistarse en la Reserva del Cuerpo de Marines y en los años 50 estuvo de servicio en la Guerra de Corea, donde se le conoció como el oficial responsable de mantener el club de oficiales bien surtido de licores, pero nunca se le vio en el campo de batalla.

Por supuesto, cataba bien la mercancía y frecuentaba prostitutas, pero tal y como ocurrió con el actual presidente George W. Bush, sintió la llamada del Altísimo, se ordenó Ministro en 1961 y ahí está predicando desde entonces en una cadena que abarca 180 países y 71 idiomas. ¡Vaya "ciudadano privado"!

Compró una televisora, bautizada como el Canal de la Familia, que por los 90 se transformó en el Canal Fox, el mismísimo que apoya sin condiciones a Bush y sus guerras y dos veces al día transmite el Club de los 700... ¡Vaya "ciudadano privado" el que así propaga su fariseísmo!

Pero hablamos de sus declaraciones a favor del asesinato de Chávez y esto no es nada nuevo en quien es un asiduo blasfemo, escondido bajo un supuesto manto de cristiandad. A finales de la década pasada dijo, en idéntica argumentación, que había que matar a Osama bin Laden, al líder de Corea del Norte, a Saddam Hussein y a otros para ahorrar miles de millones en las guerras.

 Por demás, Robertson extiende su apoyo al sionismo y es un consistente defensor del Gran Israel, al punto de ser condecorado por ese Estado dada su "firme posición frente a la maldad". Bueno, se presupone que esos malvados son los palestinos, los árabes y el Islam.

Sus fanfarronadas van desde poder controlar el rumbo de los huracanes para que no toquen sus propiedades en Virginia Beach, hasta hacerle la guerra a la parte de la humanidad que no comulga exactamente con sus ideas. Para él, el fatídico 11 de septiembre de 2001 fue obra de paganos, practicantes del aborto, feministas, gays, lesbianas y la Unión Americana de Libertades Civiles.

El pedigrí es voluminoso y podríamos escribir montones de páginas. Para muestra basta, y que el increíblemente estúpido Pat Robertson nos coja confesados...
 

El manual jesuita para detectar y enfrentar pedofilia y abusos sexuales

Documento aborda el tema desde el punto de vista sicológico, revela la manera de enfrentarlo, descarta el celibato o la homosexualidad como causa y advierte que uno de cada 8 menores es abusado antes de cumplir los 16 años.

“Me ha parecido necesario rehacer el antiguo documento, incorporando una descripción actualizada del trastorno psicosexual de la pedofilia y otros tipos de abuso de poder, así como ofrecer un cuadro resumen de la legislación chilena sobre esta materia. Lo más importante, sin embargo, está en volver a impulsar un protocolo que recoge las normas y procedimientos que tanto jesuitas como otras personas de nuestras obras deben observar. Buscamos, por una parte, promover un ambiente formativo sano y seguro para nuestros niños y niñas y, por la otra, regular el modo de proceder en el caso que existan sospechas o denuncias”.
Así comienza la carta el sacerdote jesuita y provincial de la Orden en Chile, Eugenio Valenzuela, que pone en conocimiento de los “padres superiores” y los “jefes de obra y movimientos” de la existencia de un nuevo documento, un verdadero manual, para enfrentar la pedofilia y los abusos sexuales.
Mientras El Vaticano hacía su protocolo y la Iglesia de El Bosque se desangraba por las denuncias contra su líder espiritual, Fernando Karadima, los jesuitas trabajaban afanosamente en la actualización de un antiguo documento denominado “Normas y procedimientos de la Compañía de Jesús en Chile para el cuidado de un ambiente formativo sano con niños y niñas y la prevención de abusos sexuales”.
Para Valenzuela, dada la experiencia de los últimos años, el momento requería contar con un “procedimiento que impulse la transparencia y un actuar eficaz y rápido” frente al problema.
La idea era que el documento fuera difundido, a partir de 2011, en todos los lugares donde los jesuitas estuvieran presentes. “Le pido a cada superior de comunidad que promueva una reunión de comunidad que ayude a los jesuitas a conocer y apropiarse de este documento. Así también, le solicito a cada jefe de obra que procure que se observen todas las normas de prevención, incluyendo un taller formativo para todos aquellos que, de una u otra manera, tengan acceso o contacto con menores de edad. También les pido la adecuada publicidad de estas normas en nuestras obras”, señaló Valenzuela.
Para facilitar y hacer las denuncias expeditas y eficaces, señala el instructivo, en cada obra jesuita debía operar uno o dos delegados del provincial (laico o laica) quienes deben velar por recepcionarlas, comunicárselas al jesuita delegado del provincial en este ámbito (el Padre Ismael Aracena), velar por el cumplimiento del protocolo y, dar cuenta al provincial del cumplimiento de estas normas.
“Con este documento nos unimos a los esfuerzos que toda la Iglesia está realizando para evitar los males que provienen de las faltas graves que algunos de nuestros ministros han cometido en contra de menores. No está demás insistir en la responsabilidad que nos cabe a todos nosotros en procurar ambientes formativos respetuosos y sanos, así en como ofrecer toda la transparencia que sea posible. También de que en el caso de que se cometan abusos o se denuncien abusos cometidos en el pasado debemos velar por que se haga justicia con verdad y transparencia, y se tenga especial cuidado y atención a las víctimas”, finalizó Valenzuela.
Así, se actualizó el viejo manual con la colaboración de expertos y se confeccionó uno nuevo, dividido en tres capítulos, abordando el primero el problema de la pedofilia “desde una perspectiva psicológica para alcanzar una comprensión más amplia de este fenómeno que nos ayude a prevenirlo y detectarlo precozmente”. El capítulo segundo ofrece un cuadro resumen de la ley chilena. Finalmente, el tercer capítulo establece normas de procedimiento propias para el trabajo de jesuitas y funcionarios de obras de la Compañía con menores.
A continuación, una reproducción casi textual y completa de los capítulos 1 y 3.

CONCEPTOS Y CAUSAS

“El abuso sexual de menores ocurre cuando un adulto recurre a la seducción, el chantaje, las amenazas, la manipulación psicológica y/o el uso de fuerza física para involucrar a un niño o una niña en actividades sexuales o erotizadas de cualquier índole” comienza el documento.
Luego agrega -citando a Echeburúa y De Corral (2006) & Fagan et al. (2002)- que se estima que uno de cada 8 niños es abusado sexualmente antes de llegar a los 16 años, y que aproximadamente entre un 17% y un 25% de niñas y entre un 12% a un 15% de niños serán abusados en algún momento de su vida. En el 90% de los casos, el abusador es un hombre y un 80% de los abusos son cometidos por personas cercanas a la víctima.
“La pedofilia se define como un trastorno psiquiátrico caracterizado por un interés sexual persistente hacia niños prepúberes, que se ve reflejado en fantasías sexuales, deseos, pensamientos y/o conductas. El objeto de la atracción, el deseo y/o la práctica sexual se dirige hacia un niño o niña menor de 13 años. Se habla de trastorno porque se altera el objeto sexual propio de un adulto, que debiera ser otro adulto; y porque no permite una actividad sexual afectiva recíproca. Un individuo, para poder ser diagnosticado con este trastorno, debe tener 16 años o más y debe ser al menos 5 años mayor que la víctima.
Se estima que la prevalencia poblacional de este trastorno es de un 5%, y que es mucho más común en hombres que en mujeres. Algunos investigadores sugieren distinguir pedofilia de hebefilia para referirse a aquellas personas que presentan un interés sexual hacia adolescentes. En el ICD-107, considerando que existe esta discusión en la comunidad psiquiátrica, se incluye en el criterio diagnóstico de la pedofilia el interés en niños prepúberes, púberes y aquellos que están en el período de adolescencia temprana. Cabe señalar, sin embargo, que se estima que un 50% de personas con pedofilia no llegan a abusar de niños y que entre un 40% y 50% de los casos de abuso sexual en niños no son cometidos por personas con pedofilia. Contrario a muchas creencias, algunos pedófilos no abusan de niños y viven sus síntomas con mucha angustia”, sintetiza.
Y agrega: “En la entrevista, la mayoría de las personas con pedofilia señala sentir afecto y cariño hacia los niños y pocos explicitan o señalan ver a los niños como objetos de gratificación sexual. Son estos sentimientos los que pueden explicar la baja percepción que existe de los pedófilos respecto de las consecuencias de su conducta en los niños. De hecho, algunos autores definen la pedofilia como una alteración distorsionada en las relaciones amorosas.
La pedofilia implica una relación abusiva de poder. En general, se señala que pedófilos se acercan a niños que son percibidos como vulnerables (por ejemplo, niños cuyos padres se han separado recientemente, que parecen necesitados de atención y afecto). Es común que inicialmente les ofrezcan regalos, atención u otras formas de manifestaciones de afecto. Una vez iniciado el contacto sexual con el niño, los pedófilos usan su autoridad para aislar al niño y evitar que relate la situación a otros adultos. Es común también que pedófilos tengan además una relación cercana con la familia del niño, lo cual facilita el acercamiento a las víctimas. El niño o la niña pueden interpretar como afecto las expresiones de acercamiento sexual, aún cuando también lo vivan con ambivalencia y culpa. De todas maneras es importante señalar que los niños no tienen la capacidad para discriminar las intenciones del adulto y sus consecuencias, pero que los programas de prevención en los cuales se les enseña al niño a reconocer estas conductas y a reportarlas de manera temprana, han sido exitosos en la prevención del abuso”.
Respecto al celibato, en tela de juicio por los abusos cometidos por sacerdotes, el Manual señala taxativamente que “ningún trastorno sexual es causado por él” puesto que “la orientación y las preferencias sexuales se estructuran junto con el desarrollo de la personalidad”. Y argumenta: “De hecho se estima que, si bien en la mayoría de los casos, pedófilos hombres que abusan de niños se encuentran entre los 40 y los 60 años, hay estudios que indican que la atracción hacia niños se manifiesta temprano, durante la adolescencia, lo que sugiere que es un trastorno de inicio temprano en la vida. Este trastorno se encuentra en el individuo antes de la elección voluntaria del celibato. Otra cosa es que una persona con dificultades en su sexualidad o en su afectividad (por ejemplo, su autoestima e identidad sexual) se refugie en el sacerdocio o la vida religiosa y termine incurriendo en abusos sexuales. Tampoco existen estadísticas que sugieran que el porcentaje de pedófilos es más alto entre sacerdotes y religiosos que entre laicos. Por otro lado, si bien se señala que personas con pedofilia tienen dificultades para establecer relaciones interpersonales cercanas, se estima que al menos un 50% de ellos se casará en algún momento de su vida”.
La misma opinión se tiene respecto a la homosexualidad descartando cualquier relación entre ésta y la pedofilia, argumentando que “un porcentaje mayor de hombres que abusan sexualmente de niños se declaran heterosexuales.
“Un acto de pedofilia, además de ser un trastorno de la conducta sexual, constituye un acto criminal (sancionado por la ley civil y la ley eclesiástica) y un acto inmoral (se hace mal a una persona), cuya gravedad consiste en el abuso de poder (del adulto sobre el menor), dada la asimetría física y psicológica y de confianza (la amistad o la posición en la sociedad). Causa un enorme daño al menor en su desarrollo sexual y a su familia; y, en el caso de un sacerdote o de un religioso, perjudica gravemente el ministerio y servicio de la iglesia y la confianza en su misión con el consecuente cuestionamiento injusto de la credibilidad de otros sacerdotes. Por ello, no tiene justificación alguna, debe ser tratado como un acto delictual y sancionado”.

DETECCIÓN

Detectar y diagnosticar la pedofilia no es fácil, señala el documento. El uso de auto-reporte, común en psiquiatría y psicología tiene limitaciones importantes dada la connotación social negativa que tiene este trastorno. De hecho, en entrevistas, pueden parecer como individuos normales sin trastornos de salud mental.
La investigación en el área tiene limitaciones importantes dado que se ha estudiado fundamentalmente población penal y muy pocos investigadores han podido acceder a población clínica.
“En pedófilos se han encontrado antecedentes significativos en su historia sexual que son relevantes para detectar esta patología. Se sabe que han tenido algún contacto sexual con un niño con anterioridad, tienen antecedentes de posesión de pornografía infantil y presencia de otras desviaciones sexuales tales como, voyerismo y exhibicionismo entre otras (en tasas mayores a un 50%). Todos estos elementos son indicadores del trastorno. También se han detectado comorbilidades importantes, tales como presencia de otro trastorno psiquiátrico, como por ejemplo trastornos ansiosos, trastornos de personalidad y abusos de sustancias. Cabe destacar, que en el caso de pedófilos el abuso ocurre tanto estando como no estando intoxicado. Algunos autores señalan que individuos con pedofilia que además cumplan con los criterios de diagnóstico de psicopatía, es más probable que abusen de niños y que presenten conductas más violentas”.
Poco, sin embargo, se conoce sobre las causas de la pedofilia, según el documento por “las dificultades para poder estudiar el fenómeno”, asegurando luego que se trata de una condición mental que “suele darse de manera más frecuente en sujetos que sufrieron algún tipo de abuso cuando niños”.
Estudios con neuroimágenes, por otra parte, muestran alteraciones en el lóbulo frontal, el cual se sabe que cumple rol importante en el control de impulsos de los individuos. Esto es consistente con la manifestación de dificultades en el control de impulsos en esta población. La literatura especializada refiere que las primeras manifestaciones del trastorno se presentan alrededor de la pubertad pero que la manifestación conductual ocurre durante la adultez. Otros datos sugieren que tienen dificultades en las relaciones interpersonales, una baja autoestima, reportan una historia de lesión en la cabeza antes de los 13 años, una capacidad cognitiva disminuida y tienen historia de bajo rendimiento académico. Desgraciadamente, lo que sabemos sobre estas personas, está limitado a estudios con población penal y a un número muy limitado de investigaciones con población que se encuentra en hospitales psiquiátricos, lo que constituye una limitación importante de la literatura.
Se sabe también que situaciones de estrés llevan a individuos con pedofilia a abusar de menores, lo cual explicaría por qué la manifestación conductual se daría más adelante en la vida.

TIPOS DE PEDOFILIA

Los tipos de pedofilia se clasifican dependiendo de tres criterios: (1) atracción hacia hombres y mujeres o con una preferencia respecto del sexo de los niños; (2) rango de atracción (sólo incesto o se incluye a otras víctimas); y (3) si manifiesta atracción hacia personas de otras edades también o exclusivamente niños. Los clínicos describen encontrarse con individuos que han abusado de niños, otros que además mantienen relaciones sexuales con adultos y otros que no han llegado a abusar, pero buscan ayuda dada la vergüenza y ansiedad que les produce tener estos intereses.
Hasta la fecha no existen tratamientos que sean efectivos para eliminar el trastorno, pero se sabe que algunos pueden ayudar a los individuos a controlar su conducta. Existe un rango de tratamientos conductuales con técnicas de condicionamiento aversivo que se orientan a controlar el deseo sexual y atracción hacia niños a través de asociarlos con un estímulo aversivo.
Existen técnicas conductuales cognitivas que están orientadas a prevenir recaídas en el caso de personas que han abusado de niños y tienen como objetivo desarrollar estrategias de manejo conductual. La tasa de efectividad de estas terapias es baja y existen pocos ensayos clínicos que permitan evaluar su efectividad. Otras alternativas de tratamiento incluyen el uso de fármacos y el uso de castración quirúrgica, ambas con el objetivo de disminuir el deseo sexual. Pero es importante destacar que se considera una condición que no se puede curar y, hasta la fecha, no existe ningún tratamiento disponible que sea efectivo. En general, se sugiere que una combinación de tratamientos cognitivos conductuales con uso de fármacos parece ser una de las estrategias más efectivas para controlar la conducta.
Se sabe que lo más importante es desarrollar programas de prevención con niños que les permita reconocer qué conductas son adecuadas y cuáles no lo son, así como no generar oportunidades para que una persona con pedofilia abuse de un menor.
En el caso de abusos de parte de sacerdotes, se estima que más del 40% de los abusos ocurre en la residencia del párroco y que el riesgo es más alto si el párroco vive solo que si lo hace acompañado por otra persona. Por esta razón, normas que eviten que niños visiten solos a párrocos permiten disminuir el riesgo de manera importante.
RECUADRO 1
Normas para selección de Personal
Toda obra que trabaje con menores deberá seguir el siguiente procedimiento al momento de contratar personal:
Cuando se trata de una institución educacional que va a contratar un funcionario (un profesor, por ejemplo)
a. Solicitar siempre exámenes psicológicos que permitan diagnosticar posibles desórdenes o patologías de tipo psicosexual o de otro tipo y que impliquen una amenaza para los menores.
b. Solicitar referencias por escrito.
c. Todo funcionario nuevo será contratado por un período de tiempo limitado considerado de prueba.
Estas normas varían cuando se trata de conseguir voluntarios para una parroquia, un movimiento apostólico o alguna actividad extra curricular en una institución educacional.
a. Será tarea del párroco, jefe de obra, director de pastoral u otro responsable de la institución/movimiento entrevistar al candidato a un servicio voluntario.
RECUADRO 2

Así se debe denunciar

En caso que una denuncia afecte a un jesuita, se procederá del siguiente modo:
1. Para facilitar el procedimiento de denuncias, las posibles víctimas pueden recurrir a los delegados que el provincial nombra para cada obra y/o pueden hacer llegar la denuncia al delegado provincial.
2. En el caso de tratarse de establecimientos educacionales, los educadores y otras personas responsables del cuidado de menores tienen la obligación de denunciar los hechos criminales descritos arriba dentro de las veinticuatro horas que siguen al momento en que se conoció el hecho. La obligación opera cuando se ha cometido un hecho criminal en contra de un alumno del establecimiento donde sea que esté o cuando se ha cometido un delito dentro del establecimiento. La denuncia se puede realizar en Carabineros, PDI o el Ministerio Público.
3. Todos los jesuitas tienen la obligación de hacer llegar una denuncia que reciban al delegado provincial y al superior local. Si la denuncia es contra el jefe de obra o el superior, entonces sólo se avisará al delegado provincial.
4. El provincial nombrará una comisión ad hoc que estudiará la acusación y emitirá un juicio sobre la verosimilitud de la acusación.
5. El provincial podrá tomar medidas cautelares como juzgar la permanencia del jesuita en su responsabilidad pastoral e informará al P. General y al Obispo del lugar sobre la denuncia.
6. Se cuidarán los derechos y el anonimato tanto del acusado como del denunciante, procurando atención y cuidado para ambos en esta parte preliminar del proceso.
7. El provincial enviará el juicio de la comisión ad hoc al P. General quien indicará cómo continuar.
8. Todo lo anterior no reemplaza en caso alguno las investigaciones que la justicia civil y la propia institución lleven adelante. Siempre ha de quedar claro que la persona que hace la denuncia tiene el derecho de hacer la denuncia a la justicia civil, esto debe serle explicitado al momento que haga la denuncia.
En el caso que la denuncia afecte a algún funcionario o voluntario de la obra o institución, se sugiere el siguiente procedimiento:
1. Presentar las sospechas y/o denuncias al delegado del provincial.
2. La denuncia a la justicia, como se ha dicho, en el caso de tratarse de una institución educacional debe efectuarse dentro de las veinticuatro horas siguientes al momento en que se tomó conocimiento del hecho. Los funcionarios de un colegio o escuela a cargo del cuidado de menores están obligados a hacer la denuncia.
3. El delegado del provincial determinará cómo proceder, comunicando siempre la situación al director de la obra. Este se lo comunicará al provincial.
4. Si tras la investigación preliminar se verifica cierta verosimilitud de la denuncia, la institución deberá denunciar inmediatamente la situación a las autoridades competentes (Ministerio Público; Carabineros, PDI).