Protesta contra quema del Corán deja 40 heridos en Afganistán
Durante la marcha que se desarrolló en Kabul, miles de civiles resultaron lesionados al caerse y ser pisoteados por otros que eran dispersados por la Policía. Los manifestantes entonaron arengas antiestadounidenses y también contra el Gobierno afgano.
Cuarenta personas resultaron heridas -quince manifestantes y veinticinco policías-, en las protestas contra el cancelado plan de quema del Corán propuesto por el pastor estadunidense Terry Jones, según una fuente policial.
Diez heridos graves fueron trasladados a hospitales cercanos, dijo el jefe del departamento de investigación criminal de Kabul, Abdul Zahir.
El choque se produjo cuando los manifestantes quisieron llevar la marcha al centro de la ciudad y cientos de ellos lanzaron piedras contra las fuerzas de seguridad, que impidieron su paso montando barricadas, lanzando agua con mangueras y disparando tiros al aire.
Muchos civiles resultaron heridos cuando, al ser dispersados por la Policía, corrieron para huir del lugar pero se cayeron y fueron pisados por otros.
Los manifestantes salieron a la calle para denunciar el plan del pastor estadounidense Terry Jones de quemar ejemplares del libro sagrado musulmán en el noveno aniversario del 11-S, algo que finalmente no se llevó a cabo.
La marcha coincide con el cierre, en la medianoche de este miércoles, de la campaña para las elecciones al Parlamento afgano, que se celebrarán el próximo 18 de septiembre.
El día 10 ya tuvo lugar en Kabul una protesta -en la que murió una persona- contra la quema del Corán y luego se registraron otras en la provincia oriental de Logar.
Kabul (Afganistán)
En este territorio se está empezando a ver las fuerzas que trabajan para el principado llamado Gog, quien quiere volver con su fuerza a levantar llamado de guerra contra el territorio de Israel.
ResponderEliminarEn días más nos estaremos enterando de severas heridas económicas que los Iluminati han estado provocando en este territorio. Dichas llagas despertarán los fuertes rugidos de una guerra por alimentos que se manifestarán en el plano visible por fuertes revueltas civiles. Éstas provocarán que los afganos se destruyan unos a otros sin piedad. Mientras tanto, y por detrás de los conflictos sociales, una élite de hombres que ha pactado la zona a las tinieblas estará trasladando el oro acumulado a precio de la sangre inocentes de los más pobres. Este oro será transpuesto en empresas bélicas que atacarán Irán pretendiendo despertar a una Guerra Mundial sin precedentes.
Sin embargo, el Señor me ha mostrado su carro de guerra colocándose en estos territorios y movilizando fuertes huestes de guerra celestial en contra de todas estas artimañas del error.